miércoles, 5 de agosto de 2009

Perdida en la oscuridad de la noche - Laguna Neveria 4569 msnm

Alzo la mirada al cielo nocturno, y puedo observar un sinfín de estrellas, deberían llamarse ilusiones por que son como un sueño. Estas que juegas en mi mente, imploro calor, tu protección, un arrullo en tus brazos, todo llega en un instante mi aliento vuela en busca de tus caricias. Y siguió la noche y jugaron las estrellas en mi cabeza, simplemente me perdí en la oscuridad de la noche, bajo las estrellas de tu firmamento Nevería.

Feliz de iniciar una nueva caminata destino Laguna Nevería 4569 msnm, junto con unos amigos salimos el sábado algo tarde rumbo a San Mateo.
No había dormido muy bien ya que una llamada de “una personita” me despertó a las 3am para decirme “buenas noches” y otras cosas … llamada q no sólo a mi me quito el sueño.

El clima se encontraba muy variante con lluvias el cual hizo que nuestro acceso sea más lento por lo resbaladizo del camino, llegamos al abra y llego la granizada y observamos el cerro Pisha de 4641 msnm que se encuentra a lado izquierdo del paso del mismo nombre, empezamos el descenso ingresando a la quebrada de Ucupampa y llegamos a la Laguna Nevería, el retorno fue mas largo entre lluvia y granizada, al final quedo pernoctar en la montaña y soportar el crudo frío de la noche.

En mi vida pensé pasar por algo similar, tengo que decir que me sentía con mucho miedo, si no era x la confianza de mis amigos, creo que lo hubiera pasado mal, de por si, soy muy nerviosa, pero en ese momento mis nervios quedaron a un lado, ya que al mirar el cielo contemple miles de estrellas de diferentes tamaños, unas parecían que me saludaban con su luz intermitente y otras pasaban fugazmente y desaparecían en la noche, me acordé de mi anterior blog sobre el “enamoramiento de dos estrellas” es decir habían estrellas que se encontraban en espera para amarse y sería partícipe de ello.

Fue una noche para no olvidar, nunca sentí tanto frío, ni cuando viaje a Puno, ni mucho menos cuando fui al Huaytapallana, Meiggs con su viento helado ó Nevados de la Cordillera Central, me di cuenta que si no cuentas con un buen compañerismo las cosas hubieran sido peor, cada uno pendiente del otro, tratando de darnos calor corporal, conversando, el silencio, el apretón de mano, el abrazo de oso, todo era necesario para abrigarnos.

En ese momento me vinieron tantas cosa a la mente, en primer lugar la preocupación de mi familia, los riesgos que uno puede tener cuando realiza estas clases de aventuras en la montaña, el clima siempre es impredecible, así que hay que estar preparados para todo.

Gracias a mi ángel salimos todos bien de la montaña, con un hasta luego pq se que volveré nuevamente, cuando no lo se, sólo espero cerrar pronto mis ojos y despertar en un lugar estrellado como el de Nevería, obviamente con un buen equipo para no sentir frío.

Gracias a ti! Pq te preocupaste!!, te dije q te quiero mucho? Bueno ya lo sabes!